Esta espectacular aglomeración de vehículos tuvo lugar el pasado 6 de octubre, cuando millones de chinos volvieron a sus casas después de haber pasado una semana de vacaciones. En el gigante asiático, los días que trascurren del 1 al 7 de octubre son decretados como fiesta nacional.
Las autoridades chinas han calculado una cifra estimada de 750 millones –casi la mitad de la población del país– de desplazamientos durante esta semana. El colapso en el tráfico fue tal que ni siquiera los 50 carriles destinados a pasar el peaje hacia Pekín fueron suficientes para acoger a todos los coches.
Este atasco no ha conseguido superar al ocurrido en 2010, que fue considerado como el mayor embotellamiento. Mantuvo encerrados a los conductores en sus coches durante 10 días en un trayecto de 100 kilómetros.
Las autoridades chinas han calculado una cifra estimada de 750 millones –casi la mitad de la población del país– de desplazamientos durante esta semana. El colapso en el tráfico fue tal que ni siquiera los 50 carriles destinados a pasar el peaje hacia Pekín fueron suficientes para acoger a todos los coches.
Este atasco no ha conseguido superar al ocurrido en 2010, que fue considerado como el mayor embotellamiento. Mantuvo encerrados a los conductores en sus coches durante 10 días en un trayecto de 100 kilómetros.
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