Bristol, Reino Unido — Una mujer de Bristol se lleva el premio a la peor cita de Tinder de la historia, luego de que tuviera que ser rescatada mientras trataba de recuperar sus propios desechos de la ventana.
El martes, Liam Smyth creó una página en GoFundMe para recibir ayuda y poder pagar su ventana rota, cual fue dañada durante los eventos ocurridos en su memorable primera cita con una mujer anónima.
Su velada empezó muy romántica, con una cena en Nando’s seguida de vino y un documental de Cienciología en su apartamento.
Las cosas empezaron a la salir mal cuando la mujer evacuó en el baño y descubrió que éste no descargaba. Asustada, recogió los desechos y los tiró por la ventana hacia lo que ella asumía, era el jardín. En cambio, el excremento cayó en el espacio entre los cristales de la ventana.
La genio decidió usar sus habilidades de gimnasia para recuperar el popó fuera de control, y se escurrió por la brecha sin pensarlo. Y aunque logró sacar los desechos, terminó atascada en el proceso.
Luego de intentar desatascarla por casi 15 minutos, el hombre finalmente decidió llamar a los bomberos para pedir ayuda. Los bomberos llegaron después de unos minutos y liberaron a la mujer, aunque, no sin antes destruir la ventana.
Ya que reemplazarla cuesta alrededor de 300 libras, el hombre ha llevado su causa a GoFundMe.
La historia de su ridícula primera cita ha juntado más de mil libras en el sitio web de financiamiento, y dice que donará la cantidad extra a dos caridades.
Por su puesto, todos los Twitterati quieren saber cuando él y la señora popó se verán otra vez.
El martes, Liam Smyth creó una página en GoFundMe para recibir ayuda y poder pagar su ventana rota, cual fue dañada durante los eventos ocurridos en su memorable primera cita con una mujer anónima.
Su velada empezó muy romántica, con una cena en Nando’s seguida de vino y un documental de Cienciología en su apartamento.
Las cosas empezaron a la salir mal cuando la mujer evacuó en el baño y descubrió que éste no descargaba. Asustada, recogió los desechos y los tiró por la ventana hacia lo que ella asumía, era el jardín. En cambio, el excremento cayó en el espacio entre los cristales de la ventana.
La genio decidió usar sus habilidades de gimnasia para recuperar el popó fuera de control, y se escurrió por la brecha sin pensarlo. Y aunque logró sacar los desechos, terminó atascada en el proceso.
Luego de intentar desatascarla por casi 15 minutos, el hombre finalmente decidió llamar a los bomberos para pedir ayuda. Los bomberos llegaron después de unos minutos y liberaron a la mujer, aunque, no sin antes destruir la ventana.
Ya que reemplazarla cuesta alrededor de 300 libras, el hombre ha llevado su causa a GoFundMe.
La historia de su ridícula primera cita ha juntado más de mil libras en el sitio web de financiamiento, y dice que donará la cantidad extra a dos caridades.
Por su puesto, todos los Twitterati quieren saber cuando él y la señora popó se verán otra vez.
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