• hace 5 años
Cuando se tiene una mascota, lo normal es que sea la reina de la casa y que todos los mimos y cariños se dirijan a él. Una situación delo más común que gusta tanto al animal como al dueño, ¿o es que tener un animal no se trata de eso, de dar y recibir amor incondicional? Sin embargo, cuando en una familia se espera un bebé hay que tener en cuenta que es más normal de lo que pensamos que en algún momento los celos hagan acto de presencia.

Tanto con tu bebé como con tu perro, lo que está claro es que adoras a los dos, y aunque en la mayoría de los casos el animal suele ser muy protector con el nuevo miembro de la casa, siempre pueden surgir los celos. ¿Cómo evitarlo?

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