Felix in the Swim (Félix va a nadar) [01-07-1922]
En este video los subtítulos están incrustados.
Félix se encuentra con un ratón, atrapado por la cola en una trampa para ratones. Félix se prepara para comérselo, pero el ratón le ruega que lo perdone. Félix accede a regañadientes y le libera. El ratón, agradecido, le dice: "Siempre que pueda hacerte un favor, Félix, llámame". Ambos se dan la mano y siguen caminos separados. Félix se va corriendo a una casa y le silba a Willie, un niño amigo suyo que está en el piso de arriba, y Félix lo invita a ir con él a una vieja piscina. El niño está de acuerdo, pero se da cuenta de que su madre está lavando ropa cerca. Félix insta al niño a que baje de todos modos. Willie intenta bajar al techo, pero su madre le grita que baje las escaleras y practique al piano. Willie vuelve a entrar y piensa que esto les pone freno a que vayan a nadar. Félix camina alrededor, pensando en qué hacer, y se encuentra con el ratón de antes. El ratón nota que Félix está preocupado y pregunta cuál es el problema. Félix explica la situación y el ratón traza un plan para que sus hermanos ayuden a Félix. Se dirigen a la casa de Willie, donde todavía está practicando piano, y Felix le susurra por una ventana cercana. Félix consigue que Willie salga por la ventana y el niño descubre que los ratones que Félix trajo consigo están tocando el piano por él. Ambos se dirigen al pozo de natación. Mientras se alejan, la madre de Willie escucha la música y cree que está mejorando, así que va a ver cómo está, pensando en ofrecerle un trozo de pastel, solo para encontrar un cuarteto de ratones tocando el piano en el lugar de Willie, para su enojo.
Cerca de la piscina hay una señora sentada en un banco, así que Willie no puede salir tal como su madre le trajo al mundo. Félix arregla la situación haciéndose con dos bañadores expuestos al aire libre en una tienda de esas prendas, Félix y Willie (¡mira tú que falta le hace a Félix!) se ponen sus bañadores y van a nadar, pero mientras se divierten, aparece una cabra de la nada y se come las ropas de Willie. Más tarde, esa noche, Félix y Willie aparecen en la casa, ambos tapando sus vergüenzas con barriles, aunque mencionando lo anterior, ¡vaya la falta que le hace Félix. Willie se cuela por la ventana de su casa, solo para caer en la misericordia de su madre, quien inmediatamente comienza a golpearlo detrás de las cortinas. Mientras Félix mira, el ratón de antes aparece detrás de él y pregunta "¿No te lo arreglé?" Félix se inclina hacia atrás para golpearlo cuando terminan los dibujos animados..
Félix se encuentra con un ratón, atrapado por la cola en una trampa para ratones. Félix se prepara para comérselo, pero el ratón le ruega que lo perdone. Félix accede a regañadientes y le libera. El ratón, agradecido, le dice: "Siempre que pueda hacerte un favor, Félix, llámame". Ambos se dan la mano y siguen caminos separados. Félix se va corriendo a una casa y le silba a Willie, un niño amigo suyo que está en el piso de arriba, y Félix lo invita a ir con él a una vieja piscina. El niño está de acuerdo, pero se da cuenta de que su madre está lavando ropa cerca. Félix insta al niño a que baje de todos modos. Willie intenta bajar al techo, pero su madre le grita que baje las escaleras y practique al piano. Willie vuelve a entrar y piensa que esto les pone freno a que vayan a nadar. Félix camina alrededor, pensando en qué hacer, y se encuentra con el ratón de antes. El ratón nota que Félix está preocupado y pregunta cuál es el problema. Félix explica la situación y el ratón traza un plan para que sus hermanos ayuden a Félix. Se dirigen a la casa de Willie, donde todavía está practicando piano, y Felix le susurra por una ventana cercana. Félix consigue que Willie salga por la ventana y el niño descubre que los ratones que Félix trajo consigo están tocando el piano por él. Ambos se dirigen al pozo de natación. Mientras se alejan, la madre de Willie escucha la música y cree que está mejorando, así que va a ver cómo está, pensando en ofrecerle un trozo de pastel, solo para encontrar un cuarteto de ratones tocando el piano en el lugar de Willie, para su enojo.
Cerca de la piscina hay una señora sentada en un banco, así que Willie no puede salir tal como su madre le trajo al mundo. Félix arregla la situación haciéndose con dos bañadores expuestos al aire libre en una tienda de esas prendas, Félix y Willie (¡mira tú que falta le hace a Félix!) se ponen sus bañadores y van a nadar, pero mientras se divierten, aparece una cabra de la nada y se come las ropas de Willie. Más tarde, esa noche, Félix y Willie aparecen en la casa, ambos tapando sus vergüenzas con barriles, aunque mencionando lo anterior, ¡vaya la falta que le hace Félix. Willie se cuela por la ventana de su casa, solo para caer en la misericordia de su madre, quien inmediatamente comienza a golpearlo detrás de las cortinas. Mientras Félix mira, el ratón de antes aparece detrás de él y pregunta "¿No te lo arreglé?" Félix se inclina hacia atrás para golpearlo cuando terminan los dibujos animados..