VOX declara la guerra a la editorial Santillana, los colegas de ETA y los idiotas que le acusan de nazi
- hace 2 años
No me canso de repetir, cada vez que veo las tánganas que se montan en los chats de Periodista Digital sobre a quién apoyamos, que lo único relevante para nosotros es sacar a Pedro Sánchez y su cuadrilla de La Moncloa.
Y es urgente, porque si este caradura renueva a finales de 2023 y consigue otros cuatro años, va a dejar España como una era.
Por tanto, cuando llegue el momento de votar, sea en municipales, autonómicas o generales, nuestro consejo es que ustedes opten por aquello que más pueda fastidiar a Sánchez y a los proetarras, golpistas y zarrapastroso que lo arropan.
Mi tesis es que Feijóo se encamina directo a la victoria, pero que el PP necesitará a VOX para sumar mayoría absoluta.
Y que la presencia del partido de Abascal, sobre todo si consigue al menos esos 50 diputados que te permiten llevar al Tribunal Constitucional las tropelías oficiales y apretarle las tuercas legales al Ejecutivo, es importante.
Recuerdo esto justo cuando nos llega la noticia de que un juzgado ha admitido a trámite la querella interpuesta por VOX contra la editorial Santilla, antiguo buque insignia del Grupo PRISA, por incluir en sus libros de texto la tesis de que el de Santiago Abascal es un partido nazi.
No se trata solo de una manipulación de la Historia o de un intento de intoxicación ideológica vomitivo, sino de una mentira flagrante.
Lo que se pretende, además de sintonizar con el Gobierno PSOE-Podemos y con la panda de sectarios de su entorno, es criminalizar a VOX, pavimentando el camino para su hipotética ilegalización.
A diferencia de los herederos de los asesinos etarras y de los golpistas catalanes a los que se abraza Sánchez, VOX es un partido constitucional, respetuoso de las normas de nuestra democracia, legitimo y defensor de España.
Y que esté ahí enriquece el debate, permite poner sobre el tablero asuntos que se ocultaban, fuerza al PP a ser menos pastelero y amplia nuestra libertad.
Y es urgente, porque si este caradura renueva a finales de 2023 y consigue otros cuatro años, va a dejar España como una era.
Por tanto, cuando llegue el momento de votar, sea en municipales, autonómicas o generales, nuestro consejo es que ustedes opten por aquello que más pueda fastidiar a Sánchez y a los proetarras, golpistas y zarrapastroso que lo arropan.
Mi tesis es que Feijóo se encamina directo a la victoria, pero que el PP necesitará a VOX para sumar mayoría absoluta.
Y que la presencia del partido de Abascal, sobre todo si consigue al menos esos 50 diputados que te permiten llevar al Tribunal Constitucional las tropelías oficiales y apretarle las tuercas legales al Ejecutivo, es importante.
Recuerdo esto justo cuando nos llega la noticia de que un juzgado ha admitido a trámite la querella interpuesta por VOX contra la editorial Santilla, antiguo buque insignia del Grupo PRISA, por incluir en sus libros de texto la tesis de que el de Santiago Abascal es un partido nazi.
No se trata solo de una manipulación de la Historia o de un intento de intoxicación ideológica vomitivo, sino de una mentira flagrante.
Lo que se pretende, además de sintonizar con el Gobierno PSOE-Podemos y con la panda de sectarios de su entorno, es criminalizar a VOX, pavimentando el camino para su hipotética ilegalización.
A diferencia de los herederos de los asesinos etarras y de los golpistas catalanes a los que se abraza Sánchez, VOX es un partido constitucional, respetuoso de las normas de nuestra democracia, legitimo y defensor de España.
Y que esté ahí enriquece el debate, permite poner sobre el tablero asuntos que se ocultaban, fuerza al PP a ser menos pastelero y amplia nuestra libertad.