• el año pasado
Armandito (Tony Rodríguez) llega a la ciudad y alquila una habitación en una posada sin tener la menor idea del terror que le espera apenas entre al cuarto del muerto, como lo llaman el resto de los pensionados.

Y es que el dormitorio guarda una espantosa sorpresa para sus huéspedes: la mano, una extremidad que posee vida propia, cuyo origen es un misterio aunque definitivamente demoníaco.

Armandito sufre una descarga eléctrica producida por la mano, que lo deja inconsciente. Al despertar se da cuenta que le han injertado la mano y esta toma control de su vida llevándolo a realizar actos que jamás hubiera imaginado… o atrevido.

Su vida es un caos, parecen interminables los problemas en los que se encuentra, pero la única opción para liberarse de semejante maleficio podría tener un costo muy alto.

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