"Todavía no tengo ninguna muerte sobre la conciencia", dice entre risas Davide Castenetto. Seguramente, pocos sepan quién es este jefe de taller, pero este hombre es el que desde hace 20 años reta cada edición a Supervivientes y a los concursantes. Él es el responsable de La Noria Infernal, del Duelo al Sol y de todos los juegos que desde hace dos décadas se ven en Supervivientes, tanto en su versión española como en su versión italiana.
Castenetto llegó de casualidad o, más bien, por un corazón roto -el suyo- a Supervivientes. Hace 20 años rompió con una chica y necesitaba escapar. Cogió el petate y se puso a viajar por el mundo hasta que llegó a Honduras. Allí llegó hasta la producción de un reality show que acababa prácticamente de nacer. Se remangó y dejó volar su creatividad aprendiendo día a día y casi hora a hora lo que supone crear hasta 91 juegos en una edición.
Castenetto llegó de casualidad o, más bien, por un corazón roto -el suyo- a Supervivientes. Hace 20 años rompió con una chica y necesitaba escapar. Cogió el petate y se puso a viajar por el mundo hasta que llegó a Honduras. Allí llegó hasta la producción de un reality show que acababa prácticamente de nacer. Se remangó y dejó volar su creatividad aprendiendo día a día y casi hora a hora lo que supone crear hasta 91 juegos en una edición.
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