La historia de Isaura, una esclava que nace en la hacienda del comendador Almeida, en Campos, en el año 1835. Isaura es hija de la bella Juliana, esclava del comendador, y de Miguel, el capataz de la hacienda. Juliana muriO despues del parto, e Isaura fue adoptada y educada por Gertrudis, esposa del comendador, quien siempre quiso tener una hija. Diecinueve años despues, Leoncio, el hijo del comendador, regresa a la hacienda y se obsesiona de ella. Sin embargo, es obligado a casarse por interes con Malvina hija del rico coronel Sebastian. Al morir Gertrudis y Almeida, Leoncio manipula unos documentos para impedir la libertad de Isaura y poder seguir manteniendola bajo su propiedad. Leoncio esta cada vez mas agresivo y su mujer huye de el; quedando Isaura a su merced, con lo cual tambien se ve obligada a escapar ante la violencia que ejerce. Tomasia, la condesa de Campos, la ayuda en su fuga, y aprovecha para cambiarse de nombre: Elvira. La joven conoce luego al verdadero amor de su vida, Alvaro. Pero un dÝa Leoncio la recaptura, regresandola a su condicion de esclava, y tiene la idea de casarla con Belchior, el jardinero deforme. Alvaro intentara la dificil mision de rescatarla.
Encuentra todos los capitulos en https://sites.google.com/view/cyberhome-nicaragua
Encuentra todos los capitulos en https://sites.google.com/view/cyberhome-nicaragua
Category
📺
TVTranscripción
00:00Yo no creo que el Sr. Álvaro, el Sr. Miguel y André dejen a Isaura presa en su lugar.
00:08Para verse libres de la amenaza de la orca, no sé por qué no.
00:13Isaura, entre todos, es la que tiene mejores oportunidades a la hora del juicio.
00:20Pero lo peor es que si Isaura dice la verdad, y si no fue ella, todos somos sospechosos de ese asesinato.
00:28Todos los que allá estábamos, no sólo el Sr. Álvaro, André y el Sr. Miguel,
00:36sino también yo, tú, mi hijo, Malvina, el Sr. Geraldo, Chester Rosa y el Sr. Baikior también.
00:48Yo no oí nada y no diré nada.
00:51Oiga, quisiera ver a mi florecita lejos de esas rejas, pero no sé de qué modo.
01:01Contando todo lo que sabe, Sr. Baikior.
01:04Pero no vi nada. No sé por qué todo el mundo se peña en que vi alguna cosa. No vi nada.
01:11Miren, sólo estoy aquí porque Doña Malvina me mandó pedir autorización para que entierren al Sr. Leóncio allá en la hacienda.
01:22Es una idea horrible de Doña Malvina.
01:24No, no, espera, mi cielo. Le debo esto a mi madrina. El Sr. Leóncio era el único hijo que tenía.
01:31Que sea como tú quieras, Isaura.
01:33¿Quieres decir entonces que pueden enterrar al demonio en la hacienda?
01:38Sí pueden, Sr. Baikior.
01:40¿El joven rubio, ahora que es dueño de todo, los va a dejar?
01:44Si es la voluntad de mi novia, puede ser.
01:47Sí, sólo están esperando esta noticia para poder enterrar al maldito allá.
01:51Sí, el Sr. Geraldo mandó decir que vendrá luego para acá, luego, luego, después.
01:59Tiene un romance con la viuda, que da gusto ver, la mima aquí, la mima allá.
02:06Ahora que Doña Malvina, no, la inocente está con una tristeza que hasta duele el corazón.
02:15Ni parece que el difunto la maltrató tanto a ella, ¿no?
02:20Sí, Doña Malvina amaba mucho al Sr. Leóncio.
02:24Sí, eso es verdad.
02:26Bueno, Dios los bendiga porque ya tengo que irme.
02:31Adiós.
02:33Vaya con Dios.
02:35Hasta luego.
02:39¿Estás bien por la gracia de Jesús, hijo mío?
02:43Ay, tía, mi padre está sospechando que yo maté al Sr. Leóncio.
02:49Sólo lo dije porque tenías mucha rabia en el corazón.
02:52¿Quieres ver a nuestro muchacho en la horca?
02:55Mi tía tiene razón, padre. No les cuesta nada querer echarme la culpa.
03:00¿Crees en verdad que se apresan a nuestro muchacho y él se escapa de la horca?
03:07¿Lo crees en verdad?
03:09Sé que el negro no se escapa de la muerte cuando el Sr. muere.
03:14Sea de puñalada, de tiro o de veneno.
03:18Entonces no repitas eso ni de broma.
03:22Sólo se lo dije a André, Joaquina. No le dije a nadie más de mi sospecha.
03:26Yo no maté a ese maldito padre. Y no fue por falta de deseos.
03:32Lo mataron antes que yo.
03:34Un hombre malo como el Sr. Leóncio.
03:37Que hizo tantas maldades a los negros.
03:41Que mató a mi madre.
03:44Quería verlo muerto, sí.
03:48Pero no fui yo.
03:50Y tú también.
03:52Deja de decir bobadas.
03:53Deja de decir bobadas.
03:55Si alguien escucha irás preso.
03:58Pensándolo bien.
04:00A mi modo de ver, pudiste matarlo antes.
04:05Y no lo hiciste.
04:07No lo maté porque no está en mí.
04:09Yo no soy un asesino.
04:11Estoy más calmada.
04:13Estupendo, Isaura.
04:15Tenemos que pensar con bastante calma en todo lo que ocurrió.
04:19Tenemos que descubrir al verdadero asesino para que tú seas liberada.
04:23No me agrada pensar que todos los que estaban en la cabaña
04:27son personas tan queridas.
04:29Sería terrible tener que acusar a alguien que estimo
04:32para conseguir mi libertad.
04:34Es verdad, Isaura, pero sea quien fuera.
04:37Rosa, la Condesa, el Sr. Belchior, André, el Coronel,
04:41Doña Malvina, el Sr. Enrique,
04:44mi amigo Geraldo,
04:46y hasta tu propio padre, mi querida.
04:48Aunque haya sido el Sr. Miguel,
04:50el culpable tendrá que pagar por el crimen que cometió.
04:53Lo sé.
04:55El Sr. Miguel y la Condesa fueron para allá juntos,
04:57solo que no conversé con ellos aún sobre los detalles.
05:00No, mi padre no me dejaría estar presa en su lugar.
05:04Sí, también creo que no, Isaura, pero estaba allá
05:07y tenía razones muy fuertes para querer matar a Leoncio.
05:11Doña Malvina parecía haber llegado con don Geraldo, según oí.
05:18No lo sé, me parecía tan abatida.
05:21Pero en fin, fue muy humillada por Leoncio.
05:24Es posible que se vengara, sí.
05:26Y la Condesa, una sospechosa fuertísima,
05:31más que nadie deseaba vengarse.
05:33No, la Condesa creo que no tendría el valor para matar.
05:40Sucede que si pensamos así, Isaura,
05:42no tendríamos al criminal.
05:44Alguien tuvo el valor y lo mató.
05:47El Rosa.
05:48¿Rosa?
05:50Rosa es muy atrevida y fue muy humillada por el señor Leoncio.
05:54Pero las maldades de Rosa creo que nunca pasaron de intrigas.
05:58¿Qué motivo tan grave tendría para matar al señor Leoncio
06:02de una forma tan cruel?
06:04¿Qué motivo?
06:06El coronel.
06:08El coronel, Isaura.
06:10Estaba muy indignado de todos los crímenes de Leoncio,
06:13especialmente las amenazas de muerte.
06:14La zurra que Leoncio le dio a doña Malvina.
06:17Sí, el coronel.
06:19Y está también el señor Belchior.
06:21Lo golpeó mucho el canalla.
06:23Sí.
06:28Con permiso.
06:30¿Y entonces, señor Belchior,
06:32¿podré enterrar a mi marido?
06:35El señor Álvaro dijo que corría por cuenta de la señora Isaura.
06:40Sí, pero ¿qué resolvieron, señor Belchior?
06:42Sí, mi florecita Isaura dijo que la deja.
06:46Porque ella, por su madrina, ¿sabe?
06:49A doña Gertrudis no le hubiera gustado estar lejos de su hijo.
06:56En fin, vamos a enterrarlo.
07:03Sí.
07:05Vamos a acabar ya con esto, Malvina.
07:08Está todo listo para el entierro.
07:10Nadie más vendrá para el delorio.
07:15Es cierto, papá.
07:17Vamos a enterrarlo.
07:31¡Presa! ¡Presa! ¡Presa!
07:33¡Presa! ¡Presa, mamá!
07:35¡Presa! ¡Presa!
07:37La esclavita está presa.
07:38¡Presa! ¡Presa! La esclavita está presa, mamá.
07:41Está presa. Está en prisión.
07:43La esclavita está presa, mamá. Está presa.
07:45Y se va a pudrir en la cárcel por el crimen sórdido que cometió.
07:49Mató a Leoncio Almeida con puñaladas en el pecho.
07:53¿Cómo puedes estar feliz con toda esta desgracia que ocurrió?
07:57¿Entonces no percibes que el padre del hijo que esperas está muerto?
08:01No repita eso, mamá.
08:03Se lo prohíbo.
08:05El padre de mi hijo es Álvaro.
08:06Es el finado Leoncio.
08:08Y tu hijo va a nacer sin padre.
08:10Y tú vas a ser madre soltera.
08:14Mamá, enloqueció.
08:17El padre de mi hijo es Álvaro, mamá.
08:21El joven más codiciado de toda la ciudad.
08:24El más deseado.
08:26Mi novio Álvaro.
08:28El hombre que me fue destinado.
08:31Blanca.
08:32Blanca.
08:35Ay, hija mía.
08:37Estás cada día peor.
08:40Conversaré con tu hermano.
08:42Debemos llevarte a la corte para atenderte, Blanca.
08:46No, no, no. Estoy estupenda.
08:48Estoy estupenda.
08:50Y muy lista para poner mi plan en práctica.
08:54Ay, ya Álvaro, Álvaro.
08:57Ha de despertar en mi lecho, sí.
09:00Pero Geraldo no puede saber nada, mamá.
09:03Es secreto.
09:05Secreto.
09:06Es secreto.
09:17La caja del señor Leoncio llegó.
09:19¿Qué? ¿No va a haber velorio?
09:22¿No?
09:23Mira el dedito.
09:24Mi hermana Malvina.
09:26Ella no quiere que nadie se burle del...
09:29del cuerpo del difunto.
09:33Al menos descansará aquí en la hacienda.
09:36Junto a su padre y a su madre.
09:39El señor Leoncio puede hasta ser enterrado aquí en la hacienda.
09:43Con doña Gertrudis y el comendador.
09:45Pero descansar...
09:47Descansar no lo hará.
09:49Su alma va a penar aún mucho.
09:51Sí.
09:53Yo también creo eso.
09:55Él es un criminal.
09:58El peor pecador.
10:00El que le quita la vida a los otros.
10:03Esa que Dios nos ha dado.
10:05La justicia de Dios no falla.
10:09Voy a mirar el entierro.
10:12¿Ustedes no van?
10:13No.
10:14No me agrada.
10:16Tengo...
10:17Tengo miedo de mis pensamientos.
10:19Yo tampoco voy.
10:21Porque si voy...
10:23Sólo estaré pensando y deseando cosas malas para ese infeliz.
10:27Yo voy al entierro.
10:30Alguien tiene que rezar para que su alma descanse en paz.
10:41Voy a mirar el entierro.
10:44¿Ustedes no van?
10:45No.
10:46No me agrada.
10:47Tengo...
10:48Tengo miedo de mis pensamientos.
10:51Yo tampoco voy.
10:53Porque si voy...
10:55Sólo estaré pensando y deseando cosas malas para ese infeliz.
10:59Yo voy al entierro.
11:02Alguien tiene que rezar para que su alma descanse en paz.
11:17Adiós, Leoncio.
11:19Que Dios se apiade de tu alma atormentada.
11:23Adiós.
11:25Adiós.
11:27Adiós.
11:28Adiós.
11:30Adiós.
11:32Adiós.
11:34Adiós.
11:36Adiós.
11:38Adiós.
11:40Adiós.
11:42Adiós.
11:44Adiós.
11:45Que Dios se apiade de tu alma atormentada y te dé el descanso eterno.
11:51Que la comadre Gertrudis y el comandador Almeida puedan recibirte, Leoncio.
11:57E iluminar tu camino en las tinieblas.
12:00Que esas rosas rojas de mi hermana sean acreditadas por algo bueno que pudieras haber hecho en esta vida.
12:08Y que Dios con su infinita misericordia me pueda dar el perdón que no fuimos capaces de darle.
12:15Ay.
12:20Le pido a mi Dios misericordioso que lo reciba en sus brazos como era de pequeño.
12:32Bonito, bueno, lleno de sueños.
12:39Y que mire por su alma con los ojos de un padre que acepta al hijo de vuelta.
12:50Aún cuando sabe que él hizo mal.
12:57Amén.
12:59Gracias, Doña Joaquina.
13:02Gracias por sus palabras.
13:05Y principalmente por el perdón de todo el mal que Leoncio le causó.
13:13Doña Joaquina debe estar loca por pedirle a Dios por él.
13:17La golpeó en el tronco más que a un ladrón.
13:20Y hasta tuvo que usar un bozal.
13:22Porque Doña Joaquina es buena, es una persona buena.
13:26No es como tú, no tiene el corazón lleno de odio.
13:29Y ahora habrá reunión de los diablos.
13:31Miren quién está llegando, señor Belchior.
13:52Adiós, patrón.
13:54Vaya en la paz del señor.
13:56Dios lo bendiga, patrón.
13:58Y descanse en paz.
14:02Yo juro sobre su ataúd.
14:05Que voy a descubrir al asesino.
14:08Y me voy a vengar.
14:20Ahora una cosa es cierta.
14:23Que el mundo estará mucho mejor sin la plaga del señor Leoncio.
14:27Ah, eso sí.
14:29Sí.
14:31Sí.
14:42¿La señora confirma lo que escribió?
14:45Palabra por palabra.
14:47Yo maté al doctor Paulo.
14:50¿Y está consciente de la gravedad de su confesión?
14:54¿De las ramificaciones legales?
14:56Sí.
14:58Sé que tendré que ser encarcelada y dejar que me juzguen.
15:02Pero aún así, reafirmo que soy la única culpable de la muerte de ese infame.
15:08¿Y me puede contar cómo sucedió todo?
15:13Fuera esta puerta. Ven.
15:16Cierra los ojos.
15:18¿Por qué cortaste esos pétalos de rosa?
15:22Haré una cosa que te va a gustar mucho.
15:25Cierra los ojos, Helena.
15:28Ahora puedes abrirlos.
15:31Ay, qué lindo.
15:34¿Quién será?
15:36Debe ser la señora, la dueña de la posada.
15:39Pero ella nunca toca aquí.
15:41Pero tocó, ¿no?
15:45Silencio.
15:47Quédense quietos.
15:49Si no quieren morir ahora.
15:51¿Pero qué es esto? Cierra la boca.
15:53Mi dedo está tocando el gatillo.
15:55No me cuesta nada hacer una tragedia aquí en este cuarto.
15:58Doctor Paulo.
16:00Doctor Paulo.
16:02Es mejor llamarme Paulo, mi cielo.
16:05Pues yo, yo soy tu marido.
16:08Por favor, no nos haga nada malo.
16:10¿Cómo que no nos haga nada malo?
16:13Si fue exactamente para eso que vine aquí.
16:16No nos mate, Doctor Paulo.
16:21He matado a mucha gente, mi cielo.
16:25¿Ustedes quieren saberlo?
16:27Yo maté a mi primera novia con arsénico.
16:32Coloqué el veneno en una medicina y se la dí a tomar.
16:36¿Y saben por qué?
16:38Porque me traicionó, me engañaba.
16:40Pero usted es médico.
16:42¡Me puedes llamar el Doctor Muerte, estúpido!
16:45He matado a muchas viejecitas que cuidaba.
16:48Solo para robarle sus joyas.
16:50¡Su lugar está en el infierno, diablo!
16:53Primero mataré a mi rival.
16:55Después voy a poseerte, Helena.
16:59Con toda mi sed, mi lascivia.
17:02Y dependiendo de lo que digas después, voy a matarte.
17:06¿O no?
17:08Por favor, Doctor Paulo, no mate a Diego.
17:10¡Quítate de frente!
17:14Di tus últimas pregarias, doctorcito.
17:17¡Pues vas a morir ahora!
17:24Y murió.
17:26Él estaba tan seguro de que nos mataría,
17:30que no dudó en confesar sus crímenes.
17:33¿La novia que envenenó?
17:35Las pacientes ancianas que mataba para robar dinero y joyas.
17:39Es increíble.
17:41¿El Doctor Paulo?
17:43¿Quién lo diría?
17:45Un hombre tan lleno de pose,
17:47de familia y novia,
17:49¿y quién lo diría?
17:51¿Quién lo diría?
17:52Un hombre tan lleno de pose,
17:54de familia ilustre,
17:56médico graduado.
17:58Era un monstruo, sargento.
18:00Solo estaba interesado en mi dote.
18:02Rehusé mi casamiento de todas las formas.
18:05Huí dos veces.
18:08Pero mi padre es muy necio,
18:10y se empeñó en casarme.
18:12¿Y la señora se arrepiente de lo que hizo?
18:15No.
18:17Mate al Doctor Paulo para salvar mi vida.
18:19La de Diego y la del hijo que estoy esperando.
18:24Tengo la conciencia en paz.
18:27No lo maté por odio ni por venganza.
18:30No fue nada premeditado.
18:32Maté para no morir.
18:34Muchas gracias, Doña Elena.
18:36Por favor, acompáñeme.
18:50Señorita Elena.
18:54¿Cómo te va, Isaura?
18:56¿Supe lo que sucedió?
18:59Lamento su suerte, Doña Elena.
19:02No tiene por qué, señor Álvaro.
19:04Soy culpable.
19:06Mala suerte tiene Isaura,
19:08que es inocente, y yo soy culpable.
19:10¿Por qué?
19:12¿Por qué?
19:14¿Por qué?
19:16¿Por qué?
19:17Mala suerte tiene Isaura,
19:19que es inocente y está presa.
19:21¿Y usted cómo sabe que Isaura es inocente?
19:24La conozco bien.
19:26Sé que no sería capaz de matar.
19:29Muchas gracias, Doña Elena, por la confianza.
19:32Me estoy equivocando.
19:34Tampoco usted sería capaz de matar.
19:37Y no obstante, mató.
19:40Fue una cuestión de sobrevivencia, Sargento.
19:43En el caso de Isaura también.
19:47¿Por qué insiste en atribuir la culpa a Isaura, Sargento?
19:51Debería investigar a los otros sospechosos,
19:54en vez de acusar siempre a Isaura.
19:56No hay otros sospechosos.
19:58Y en el caso de Doña Elena,
20:00tuve una orden de aprehensión y la hice cumplir.
20:03Ahora, por favor,
20:05retírese, señor Álvaro.
20:07El horario de visitas terminó.
20:09¿No me puedo quedar más tiempo?
20:11No.
20:13Somos muy severos con los visitantes.
20:15Vete, querido.
20:17De nada.
20:19Ahora, con la señorita Elena a mi lado,
20:21estaré más conforme, ¿sí?
20:23Una le hará compañía a la otra,
20:26para consolarnos.
20:28Confieso que me voy más tranquilo,
20:30sabiendo que usted está aquí.
20:32Vaya en paz, señor Álvaro.
20:36Ahora me voy, mi amor.
20:38Voy a conversar con don Geraldo
20:40y tomaré algunas providencias.
20:42Hasta mañana.
20:44Hasta mañana, mi cielo.
20:47Si acaso necesitan alguna cosa,
20:49solo llamen.
20:57Es terrible este lugar, señorita Elena.
21:01Y pensar que mi padre estuvo preso aquí
21:04por mucho tiempo aún siendo inocente.
21:07Como yo.
21:09Y es ahora.
21:11De verdad.
21:13Siento mi corazón aliviado.
21:15Confesé la verdad.
21:17Y mi amado está en libertad.
21:20Ese es motivo suficiente
21:22para soportar mi castigo
21:24con resignación y humildad.
21:28Espero que la compañía de usted
21:31me ayude a soportar esta prisión.
21:34Tenemos mucho que conversar.
21:37Vamos a leer poesías,
21:39haremos zapatitos tejidos para mi hijo.
21:42Lo que no podemos es entregarnos
21:45al desánimo y a la desesperanza.
21:47Sí.
21:49Vamos a ocupar nuestro tiempo.
21:52Así el horario de visitas
21:54llegará más rápido.
21:56Día tras día.
21:58Así podré estar con mi querido Álvaro
22:01y con mi padre.
22:03Ay, ni hables de padre.
22:07Cuando mi padre sepa que confesé y estoy presa.
22:17No piensen que se quedará así.
22:19El Sr. Leóncio fue asesinado por uno de ustedes.
22:22Voy a descubrir al asesino.
22:25Y voy a hacerle un llamado a mi padre.
22:28No.
22:30No.
22:32No.
22:34No.
22:36No.
22:38No.
22:40No.
22:42No.
22:44No.
22:45Voy a descubrir al asesino.
22:47Y lo mandaré a la cárcel.
22:50O al infierno.
22:58Quien debería estar preso
23:00es usted Sr. Francisco
23:02por amenazarnos de esta forma.
23:04Usted respete mi dolor Sr. Chico
23:07y basta de hacer amenazas.
23:09Vámonos Sr. Chico, no cause problemas.
23:11El culpable tiene que pagar por este crimen.
23:13Encontrar al asesino es problema de la milicia, y márchese antes de que pierda la paciencia.
23:19Yo voy a encontrar al asesino, sea rico o sea pobre, se las verá conmigo.
23:26Olvídelo señor Chico, vámonos pronto.
23:28Me vengaré señor Martiño, el asesinato del señor Leóncio no quedará impune.
23:36Vámonos.
23:38El señor Chico es muy malo, malo como el señor Leóncio o hasta mucho peor.
23:45Debes tener mucho cuidado con ese hombre.
23:48Bueno, plantaré unas flores en la tumba para adornarlo un poco,
23:53y tal vez el cuerpo del señor Leóncio nace de nuevo en flor, quien sabe.
23:59Permiso.
24:02Vámonos pronto papá.
24:03Leóncio está muerto y enterrado, ya no hay nada que hacer aquí.
24:14Acepte mi pésame señora, le juro que es verdadero.
24:18Estamos junto a la sepultura de mi marido don Geraldo, por favor respete mi luto.
24:26No pasa por mi mente tener otra conducta, deseo durante toda mi vida tener el marido de mi madre.
24:32Deseo toda mi vida tener el máximo de sensibilidad con sus sentimientos.
24:39Yo le deseo éxito a usted en la defensa de Isabela.
24:43Gracias.
24:46Permiso.
24:48Su bendición, señor coronel mi padre.
24:51Dios te bendiga Rosa.
24:54¿Cuándo es que me dará mi carta de libertad?
24:57Lleguiste la hora más inoportuna para molestarme con este asunto.
25:01Esto es mucha impertinencia, es algo abominable.
25:06No necesitas soltar a los perros sobre mí.
25:10Solo lo dije, porque Isaura dijo que tal vez usted me conseguiría mi carta de libertad.
25:17Isaura está presa, no me aflijas más con este asunto, ¿no ves como estoy?
25:22Lo veo.
25:24No solo usted está nervioso con toda esta situación, mi padre.
25:28Yo también lo estoy.
25:30Hasta luego.
25:35Él me llevó a la carretera.
25:37El señor Chico estaba ahí, esperándonos con una carreta.
25:42Me llevaron a una cabaña de casa abandonada, que era del comendador desde hace mucho tiempo.
25:48¡Qué horror, Isaura!
25:50¿Y él te lastimó? ¿Violó tu pureza?
25:54No, no lo consiguió.
25:57Yo estuve rezando todo el tiempo y eso lo incomodaba.
26:01Él imploraba que parara de rezar, pero yo no paré y rezaba cada vez más.
26:06Entonces comenzó a apretar mi garganta, hasta que desfallecí.
26:11Y cuando reaccioné, el señor Leuncio estaba muerto a mi lado.
26:17Con el puñal enterrado en el pecho, todo ensangrentado.
26:20¡Ay, por Dios santo! ¡Fue horrible, horrible!
26:24Lo sé.
26:26Es la misma sensación que siento cuando me acuerdo del Dr. Paulo tirado.
26:31La sábana estaba cubierta de pétalos.
26:35¿Pétalos?
26:37¿Pero por qué pétalos?
26:41Diego había arrojado sobre mí una lluvia de pétalos de rosa.
26:47Fue ahí donde el Dr. Paulo cayó, con la garganta cortada.
26:52La sábana quedó toda manchada, empapada de sangre.
26:59Lo maté, Isaura.
27:01Yo soy una asesina.
27:03No, usted lo mató para defenderse.
27:07Es legítimo, mató para no morir.
27:10Es su derecho.
27:12Aún así, lo maté.
27:14Pero tú no, tú eres inocente.
27:17El sargento cree que lo maté.
27:20Está seguro de que soy una asesina.
27:23¡Ay!
27:25¡Qué destino el nuestro!
27:28Y el juez también dio la orden para que me apresaran.
27:32Nadie va a creerme.
27:35Si el propio sargento testifica en contra.
27:39Dice que me vio con las manos en el arma del crimen.
27:43Que tenía sangre en mis manos.
27:45Y el Sr. Leóncio estaba ahí a mi lado, muerto con ese puñal.
27:51Vas a conseguir probar tu inocencia.
27:54La peor soy yo, soy rea confesa.
27:58Pero puede ser absuelta por legítima defensa.
28:02Tú también, Isaura.
28:04No, no puedo confesar un crimen que no cometí.
28:09¿Y tú no viste quién apuñaló al desgraciado de Leóncio?
28:15No.
28:17El asesino huyó.
28:19Probablemente porque oyó que la milicia estaba llegando.
28:26¿Presa? ¿Mi hija está presa?
28:29¿Mi hermana en la cárcel?
28:32Oh, por Dios, confesó.
28:34Sí. Cuando fue a la cárcel a visitar al Dr. Diego.
28:38Dejó una carta para el sargento y le contó todo, todo.
28:40¡Por Dios! ¡Qué imprudencia! ¡Ella podría ser ahorcada!
28:45No repita eso, papá. Ni en pensamiento.
28:49No dejaremos que eso suceda, papá.
28:52¿Y el Dr. Diego?
28:55El pobre hombre está desesperado.
28:58Fue liberado y acompañó a la guardia.
29:00Ahora debe estar allá.
29:02Dijo que pasará las noches enteras en el sereno frente a la celda de la Prima Elena.
29:06Debe estar sufriendo mucho.
29:11Él ama a mi hermana con devoción.
29:15Del mismo modo que soñé ser amada por mi finado marido.
29:19Ay, querida. Entiendo tu dolor.
29:22También perdí a mi querido José de muerte violenta.
29:26¿Pero qué puedo hacer? ¡Es preciso salvar a Elena!
29:29¡Abogados, papá! ¡Es preciso contratar a los mejores abogados!
29:32Y debemos usar todas las influencias de que podamos disponer, papá.
29:35¡Está bien! ¡Hablaré con los jueces de apelación! ¡Hablaré con el ministro de justicia!
29:41¡Don Giraldo! Estoy segura de que podemos contar con él. Es un excelente abogado.
29:46Y en este caso, la teoría de la legítima defensa es irrefutable.
29:51Elena, mi hermanita, presa.
29:54¡Qué locura!
29:56Este...
29:58Es el destino.
29:59Este...
30:01Es el destino que Dios me reservó.
30:05¡Tantas desgracias una tras otra!
30:08¡Sólo puede estar siendo castigado!
30:11Si dijera que...
30:13Que Leóncio fue castigado...
30:15O que yo misma estoy siendo castigada, lo entendería.
30:20Pero usted, papá...
30:23Tampoco entendí, papá.
30:25¿Por qué sería castigado?
30:26¿Cómo por qué?
30:28¡Tantas desgracias sucediendo una tras otra!
30:32¡Una hija presa, otra hija viuda!
30:35¡Dos yernos asesinados! ¡Uno hoy mismo!
30:38¿Cómo quieren que me sienta?
30:40Yo al menos ya no le he dado trabajo, papá.
30:43Eh...
30:45Usted habló de un modo como si la muerte de Leóncio lo afectara personalmente.
30:51¡Ay, Malvina! ¡Pero qué idea!
30:53¡Claro que me afecta!
30:56¿No nos está escondiendo nada, padre?
31:02Es muy difícil, doña Perpetua.
31:04¡No, no lo es!
31:06Basta que tú te concentres.
31:09Cierra los ojos y concentra toda tu fuerza en tus piernas.
31:18¡Por Dios!
31:20¡Se movió!
31:21¡Se movió!
31:23¡Ya lo conseguiste!
31:25¿Usted vio? ¡Lo conseguí!
31:27Intenta nuevamente.
31:34¡Qué maravilla!
31:36Ahora la otra pierna.
31:44¡Te mereces un dulce por el esfuerzo!
31:47¿Qué sería de mí sin usted, doña Perpetua?
31:49Sin su apoyo, su dedicación, su amistad.
31:55Un jovencito muy triste que mucho me impresionó desde la primera vez que lo vi.
32:01Conforme con mi mala suerte.
32:03Sí, pero en la vida no nos debemos conformar.
32:06Es preciso estar en la buena batalla, en la guerra por ideales, por una vida mejor.
32:11Estoy en guerra entonces, contra la inercia.
32:14Haré de mis músculos mis aliados.
32:16Me ejercitaré sin parar.
32:17Sin tregua.
32:19Ahora que ya sabes que es importante mantener los ejercicios, no debes parar nunca.
32:25Estoy de nuevo creyendo que un día podré volver a andar.
32:29Será una buena batalla.
32:32Tú vas a salir vencedor.
32:36¿Por qué estaría ocultando alguna cosa, Malvina?
32:39Me siento apenado, afligido, angustiado.
32:42Y es natural.
32:44El coronel, mi primo, fue sorprendido por una noticia terrible.
32:48Helena presa.
32:50Rea confesa.
32:53Usted parece tan abatido con la muerte de Leoncio como Malvina.
32:57¡Rayos!
32:59Pero claro.
33:02Enrique.
33:04No fue solo doña Joaquina quien vio a Leoncio pequeño.
33:07Yo también lo vi.
33:09Era hijo de mi mejor amigo.
33:11Era hijado de la madre de ustedes, de mi finada Antonia.
33:15No fue por nada que escogía a Leoncio para ser mi yerno.
33:18Pero no podía saber, no podía adivinar que...
33:27Lo que ocurrió hoy fue una gran tragedia.
33:30Y cuando llego a casa, como si no bastara eso.
33:34Encuentro otra aflicción.
33:37Mi hija Helena está presa.
33:40¿Qué?
33:45Piensa en cosas buenas, padre.
33:47Tiempos mejores vendrán.
33:49Bien o mal, Leoncio dejó de ser un problema...
33:52para nosotros.
33:54O tu, hermana.
33:56En cuanto a Helena, yo sé que saldrá de prisión.
33:58Buscaré a don Geraldo para que me aconseje.
34:01Sí, hace eso, Enrique.
34:03Él tiene que sacar a Helena de prisión.
34:07Mi hijita querida, mi pequeñita.
34:10Pobre primo.
34:12Tantas tribulaciones el mismo día.
34:15Pero es preciso ser fuerte.
34:18Enfrentar los designios de Dios con la cabeza erguida.
34:21No se me sale de la memoria esa imagen.
34:25Leoncio muerto a puñaladas.
34:29Yo jamás voy a olvidar eso.
34:32Malvina, malvina, hija mía.
34:36Procura conformarte.
34:39Enrique tiene toda la razón.
34:41No porque Leoncio murió, vamos.
34:44Vamos a olvidar todos los males que él cometió.
34:48Olvidas que llegó a planear tu muerte, Malvina, para liberarse de ti.
34:53No.
34:55No lo olvido, papá.
34:57Y fue por eso que él perdió todo.
34:59La esposa, la hacienda, su fortuna, toda la herencia.
35:04Por mí, Leoncio estaba más que castigado.
35:11Ahora sí.
35:14Ahora Leoncio fue castigado como tenía que ser.
35:19Usted odiaba mucho a mi marido, ¿no es verdad, papá?
35:24No, Malvina, no.
35:28Al comienzo, yo amé a Leoncio casi como se amaba a mi madre.
35:32Yo amé a Leoncio casi como se ama a un hijo.
35:35Pero después comencé a odiarlo profundamente.
35:39Mis sentimientos solo acompañaron a los tuyos, Malvina.
35:47Gracias, muchas gracias.
35:50Para siempre.
35:52Jamás olvidaré lo que hace por mí.
35:54Lo hago de corazón.
35:57Recuérdeme confesarle algo muy importante.
35:59Pero después, cuando esté en pie solo.
36:02Ese día.
36:04Ese día ha de llegar pronto.
36:06Ahora que agudizó mi curiosidad, voy a redoblar tus ejercicios.
36:10Doña Perpetua, señor Gabriel.
36:13Pedrito, ¿traes noticias?
36:15El malvado del señor Leoncio murió.
36:17Recibió más de cien puñaladas.
36:19Eso es invención de María, le gusta exagerar todo.
36:22Está bien, no sé si fueron cien, pero fueron muchas.
36:25Ay, qué horror, por Dios.
36:26Horrores que se llevaron a Isaura presa.
36:28Pobre Isaura.
36:30Siempre sufriendo.
36:32Aun cuando su verdugo ha muerto.
36:42Yo, yo ya dije que no vi nadita de nada.
36:46Ahora déjeme ir a mi casita a dormir.
36:49No está diciendo la verdad.
36:51Sí, sí, juro que la digo.
36:53No la dice, no.
36:54Mire mi dedito.
36:56No la dice.
36:58Está mintiendo, yo lo sé.
37:00Isaura está presa, señor Belquior.
37:02Es mejor que usted diga lo que vio.
37:05Hable, señor Belquior.
37:07Para sacar a Isaura de prisión.
37:10Ay, tengo dolor de estómago.
37:12Ay, todo está tan confuso aquí.
37:15Deje de mentir, monstruo.
37:17Vaya hablando que estoy perdiendo la paciencia.
37:19El señor Belquior parece enfermo.
37:21No.
37:23Debe ser remordimiento de haber dejado a Isaura presa.
37:25¿Y si es él el asesino?
37:33Por fin.
37:35¿Quién será quien mató a Leoncio?
37:40Dios es testigo de que digo esto con el corazón en la mano.
37:44Pero estoy sospechando que fuiste tú mi hija, Tomasia.
37:50¡Qué absurdo, mamá!
37:52Francamente, doña Yoconda, ¿cómo puede sospechar de su hija?
37:57Bueno, sospecho, sospecho y punto.
38:00Solo yo sé el odio asesino que Tomasia tenía por ese infame.
38:05Ay, que Dios me perdone si estoy blasfemando.
38:09Pues yo afirmo que no fue Tomasia quien mató a Leoncio.
38:13Estuvimos juntos todo el tiempo.
38:16Pues entonces, lo mataron los dos juntos.
38:20¿Quién tendría más motivos para matar al crápula de Leoncio que usted?
38:26Mamá, no nos ofenda.
38:28¿Qué pensamiento tan macabro?
38:30¿Y seremos acusados por quién?
38:32¿Por usted, mamá?
38:34Doña Yoconda, entienda una cosa.
38:36Jamás dejaría que mi hija pagara por un crimen que yo hubiera cometido.
38:40Entiendo el sentimiento de doña Yoconda.
38:42Soy madre y también siento una opresión en el corazón
38:45cuando pienso que Álvaro también es sospechoso
38:47a pesar de que yo no crea eso.
38:51No fui yo, mamá.
38:53¿Qué idea?
38:55Imagínese si dejara a Isaura presa en mi lugar.
38:57Además estuve el tiempo entero al lado de André.
39:00Siguiendo este raciocinio, eliminamos a algunos sospechosos.
39:04El señor Álvaro y el señor Miguel, los dos tienen un buen argumento.
39:08El amor por Isaura.
39:10Así como André.
39:12Tampoco dejaría a Isaura presa en su lugar, mamá.
39:14Y tío Joao también está fuera de cuestión.
39:17Está en la cabaña de casa en compañía del sargento.
39:20¿Y doña Tomasia tiene como defensa que estaba con el señor Miguel?
39:24¿Entonces quién fue el asesino?
39:27Así es, Pedrito.
39:29¿Quién fue el asesino?
39:31¡No fui yo, Rosa! ¡No fui yo!
39:34¡Yo no fui! ¡Yo no lo hice! ¡No hice nada!
39:37¡Nunca mataría al señor Leóncio de ese modo!
39:41¿De qué modo?
39:43¡Con todas esas puñaladas!
39:45¡Yo no sé nada!
39:47¡Yo no quiero seguir recordando todo para seguir aquí rumiando en mi cabeza!
39:54¿Recordando?
39:56Entonces...
39:58Usted vio todito, ¿eh?
40:00¡Hable, señor Belchior!
40:02¡Para poder aliviar su corazón!
40:05¡Quiero dormir!
40:07¡Tengo mucho dolor!
40:09¿Mucho dolor dónde? ¿Por qué?
40:11¡Dolor de cabeza!
40:13¡Estoy muy nervioso!
40:15¡Alguna cosa sabe, señor Belchior!
40:18¡O si no, fue usted mismo quien mató al maldito!
40:20¡Dejen a Belchior ir a dormir! ¡Está blanco como un papel!
40:25¡Eso, doña Joaquina! ¡Siento un dolor en el pecho!
40:29¿Qué? ¿No era en la cabeza?
40:32Bueno, ¡me está doliendo el cuerpo entero!
40:35Mañana seguiremos con esta plática.
40:37¡Venga, señor Belchior! ¡Venga!
40:39¡Le daré agua con azúcar para calmar sus nervios!
40:42¡Haga eso! ¡Haga eso, doña Joaquina!
40:45¡Después me da un té bien fuerte!
40:48¡Quiero dormir!
40:50¡Quiero dormir bien profundo y roncar hasta babear!
40:56Tengo miedo de soñar con... con...
41:00¿Con?
41:02¿Con qué, señor Belchior?
41:04El monstruo sabe alguna cosa.
41:07¡Y yo quiero saber!
41:09¿Qué es lo que sabe?
41:10¿Por qué estás tan preocupada?
41:13Joaquina, parece que adivinaste mis pensamientos.
41:16Estaba aquí pensando, ¿por qué Rosa quiere tanto saber lo que el señor Belchior vio?
41:21¿Sí? ¿Por qué quieres tanto saber, mi morena?
41:26¡Ya déjenme en paz!
41:29¡Ya dejen de mirarme de ese modo!
41:32¡El asesino está ahí suelto!
41:34¡Y ustedes están sospechando de mí!
41:36Quien nada debe, no hay por qué tener miedo.
41:40¡Quien lo mató está suelto!
41:43¡Y seguro morirá de viejo!
41:45¡Prudente fue al entierro!
41:48¡Y ya no diré nada! ¡Yo no sé nada!
41:51Oigan, si yo lo hubiera matado, estaría en la cárcel en lugar de Isaura.
41:55¡Nunca dejaría a Isaura en la cárcel en mi lugar!
41:59Mi madre desconfía de mí.
42:02Pero tendría más razones para desconfiar del coronel Sebastián Cuña.
42:06¡Ya va Leoncio!
42:08Él pudo querer vengarse de todo el mal que Leoncio le hizo a Malvina.
42:12¿Qué?
42:14¡El coronel Sebastián Cuña jamás sería capaz de cometer esa atrocidad!
42:19¿Y yo no sería, mamá? ¿Yo?
42:21¿Yo sería capaz de matar a un hombre?
42:24¿Aunque fuera mi enemigo a puñaladas?
42:27Ay, te pido disculpas por el modo como me expresé.
42:31Aunque no haya acabado totalmente mi desconfianza, ¿no?
42:34Veamos.
42:36¿Quién estaba próximo a la cabaña a la hora del crimen?
42:39Rosa.
42:41Pudo haber sido ella, no lo dudaría nada.
42:43El señor Belquior.
42:45Él sufrió mucho en manos de Leoncio.
42:48Doña Malvina.
42:50Ella también siempre fue muy humillada por él.
42:53No lo creo.
42:55A pesar del mucho sufrimiento, Malvina amaba a Leoncio.
42:58¡Miren quién habla!
42:59El amor y el odio caminan juntos lado a lado muchas veces.
43:04El amor, cuando es lastimado, fácilmente se transforma en odio.
43:10No faltan personas con buenas razones para creer la muerte de Leoncio.
43:15Bueno, Dios me perdone el pensamiento.
43:19Pero don Geraldo...
43:21¿Pero qué motivo tendría mi amigo para matar al señor Leoncio?
43:24Debido a su amor por Malvina.
43:27No lo creo, mamá.
43:29Yo conozco a Geraldo.
43:31Es sospechoso.
43:33Lo lamento.
43:35Ya son cuatro sospechosos ahora.
43:37Faltan el coronel y el señor Enrique.
43:40También estaban allá.
43:42Ya hay, por lo tanto, seis buenos sospechosos.
43:45El coronel Sebastián, Malvina, Enrique, Rosa, el señor Belquior y don Geraldo.
43:53Seis.
43:55Sin contar a Álvaro, a doña Tomás y al señor Miguel Leandre, que ya salieron de la lista.
44:01Sí, pero posiblemente pudiera haber otra persona.
44:04Sí, alguien que mató y consiguió huir sin ser visto.