Las evacuaciones masivas de inmigrantes en la frontera entre Serbia y Hungría han transformado la región, devolviendo la seguridad y la vida cotidiana a las comunidades locales.
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00:00Durante un año, las autoridades serbias han estado evacuando sistemáticamente las zonas próximas a la frontera septentrional con Hungría,
00:08recogiendo a los inmigrantes y transportándolos a acampamentos en las ciudades serbias de Kikinda y Presevo.
00:16Cientos de inmigrantes irregulares solían vivir en los graneros de la granja Karash, junto a la valla fronteriza, cerca de la ciudad de Orgos,
00:24y salían por la noche para atravesar las alambradas.
00:27Pero hoy, latas de bebidas energéticas desechadas y restos de animales son los únicos signos de que este lugar estuvo alguna vez lleno de vida.
00:35El tejado se ha derrumbado, las láminas de nylon que protegían las ventanas han sido arrancadas y casi no se ve los edificios a través de la maleza.
00:58El Ministerio de Interior de Hungría sigue diciendo que cada día más de cientos de inmigrantes desechan la frontera sur,
01:06mientras que aquí, en Orgos, dicen que ya no se han encontrado con extranjeros y que todo está en orden.
01:13De hecho, las buses también han desaparecido, con las que los inmigrantes han salido de la zona.
01:19El cambio en Orgos es visible.
01:21La última vez que Euronews estuvo allí, casi todo estaba cerrado y apenas se veía gente en los espacios públicos.
01:27Pero ahora las tiendas están abiertas y los niños vuelven a jugar en la calle.