El conductor habla del duro momento en donde por milagro no resultó lesionado de un balazo en la cabeza
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DiversiónTranscripción
00:00es un milagro que esté aquí con nosotros, porque a él le dieron un balazo en la cabeza.
00:08Bueno, esa fue otra historia que Dios nos dejó vivir para contarlo, y fue una historia
00:23increíble. Inclusive hay corridos grabados de esa historia. Fue accidentalmente, a lo mejor.
00:31Te tocaron la puerta del cuarto de tu hotel y abriste y era un hombre de color.
00:36No, no, no, déjame te digo. Nosotros viajábamos, mi esposa y yo, de Houston a Dallas, Texas,
00:44una noche que tocó con mucha tempestad, mucho tornadito, y ya íbamos cansados. Le dije,
00:52el primer hotel que veamos llegando a Dallas, ahí nos vamos a quedar. Vimos el anuncio, bajamos,
01:00ella pidió una habitación, había un señor de color. Un negro. Tú sabes que la palabra esa a
01:17mí me costó bastante, porque al decir yo esa palabra, el caso después era complicado.
01:30¿Lo dijo ahí y escuchó?
01:31Sí, pero es complicado decir esa palabra. Entonces, estaba uno de color allí y le dice,
01:45mi esposa, le enseña el croquis de las habitaciones, y dice, mi esposa, aquí.
01:52Entonces él dice, no, acá. O sea, nos pusieron lo más lejos posible. Llegamos a la camioneta,
02:00nos estacionamos frente a un hotel, que desde entonces yo, nunca que voy a hospedarme en
02:07Estados Unidos, me quedo en un hotel con las puertas que estén...
02:10A la calle.
02:11A la calle, sí. Entonces, paró la camioneta, ella va a recoger una ropa, porque íbamos a un velorio,
02:22cuando de repente ella baja y viene corriendo, y dice, ciérrale, porque viene un...
02:30Un afroamericano.
02:32Entonces, ella ya no entra en la puerta del copiloto, sino en medio de la camioneta que
02:41tenía puertas, hasta ahí llegó. Entonces yo volteo y veo que la tiene sometida a un moreno,
02:46pero cuando yo volteo al otro lado, ya está un moreno con una pistola en la puerta esta,
02:52y en la otra está otro con otra... Me tenían sometido con pistolas. Entonces le dije,
02:59nada más que no te vayan a tocar, porque aquí... Pues hasta aquí llegamos, ¿no?
03:03¿Qué es lo que quiere? Dice, me está quitando la...
03:08¿La cadena?
03:10La cadena, pero tan sinvergüenza que estaba pidiendo un segurito para...
03:14Que no se rompiera.
03:15Para que no se rompiera, quería quitarla completa. Entonces, este que está aquí abre la puerta,
03:22me quita a mí también unas colquines que traigo, unas cadenas y una... Bueno, todo lo que traía.
03:28Entonces le digo, mira, la camioneta es nueva, llévatela. Llévatela, pero nosotros tenemos
03:35familia, llévatela. Entonces, lo único que hace este, me jalonea, me saca de la camioneta,
03:42me lleva por la parte de adelante y de repente me hinca, me da un...
03:48¿Sin golpe en la corba?
03:50No, sí, pum, me hinca. En el momento que me hinca, yo traía el pelo tipo afro, arriba
03:55la pistola y... Entonces, ¿por qué estoy vivo? Fíjate, lo que no... Cuando no... Dios
04:04quiere... A la persona que le toca, le toca. Dicen que era una pistola calibre 22, que
04:12al arrimarla a la cabeza, al cabello, este dispara y la pistola esa hace un movimiento
04:19así.
04:20¿Hacia arriba?
04:21Sí. En ese movimiento es donde logra la bala entrar un poquito y hace un surco y sale,
04:29¿no?
04:30O sea, no entró a la masa encefalte.
04:33A la masa encefalte.
04:35Entonces, mi esposa grita, se asustan los demás, eran cuatro, ¿verdad? Eran cuatro
04:41los morenos, salen corriendo. Entonces, me dejan allí... Pues dice mi esposo que soy
04:48moreno y me veía blanco, sangrero. Los huéspedes salen, te ven, pero no te ayudan, se meten.
04:57Nadie te ayuda. Todos se meten a sus habitaciones.
05:01Todo el mundo le da miedo.
05:03Sí. Entonces, mi esposa y me levanto y vamos hasta rumbo a la recepción. Ya cuando llegamos
05:08a la recepción, yo nomás en la entrada me siento en un sillón como este y mi esposa
05:15va y en ese entonces, con el moreno que lo atendió y no le quería prestar el teléfono,
05:23en ese entonces no había celulares, no le querían prestar el teléfono. Mi esposa quería
05:27hablarle a alguien, a la ambulancia, a la policía. Yo nada más veo que mi esposa le
05:32tumba todo lo que tenía en el escritorio. En ese momento llegan unas patrullas. ¿Quién
05:38les llamó? A lo mejor algún huésped. Y hay un helicóptero, la policía, llega todo.
05:44Yo nomás sé que decían, me suben allí y dicen, milagro, es un milagro, es un milagro.
05:50Ahora vamos rumbo al hospital. Dice mi esposa, yo me voy a subir en la patrulla. Le dice
05:54el policía, no, pídale el comprobante de que está hospedada aquí y usted se va con
06:00nosotros. No puede subir a la ambulancia. Cuando me llegaron al hospital, pues todos
06:06decían, es un milagro, es un milagro. Y ya llegan, te dan tus primeros auxilios. Pero
06:12la historia es esta, que el médico que después me atiende era un cubano que anduvo en la
06:17guerra. Y nos dice, de un millón, uno. Del brazo de un pelo más abajo, no estaríamos
06:27hablando con usted. Entonces Dios me deja en ese momento. Y yo creo que son cosas que...
06:35Pues yo estaba muy bien trabajando en la radio. Fue cuando yo me vengo a Monterrey y Dios
06:45me dice, mira, aquí hay un programa, ese va a ser tuyo y vas a tener mucho éxito.
06:49Órale, primo.
06:50Y así fue el comienzo.