La prohibición de los estudios de obstetricia y enfermería por parte de los talibanes no solo ha cerrado a las afganas una de las últimas puertas que les quedaban para formarse profesionalmente, sino que amenaza con dejarlas sin acceso a la atención básica por las normas culturales que impiden que sean atendidas por médicos varones.
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00:00Los talibanes cierran a las mujeres una de las últimas puertas que les quedaban para
00:04formarse profesionalmente. Prohíben ahora que estudien obstetricia y enfermería. Este
00:09nuevo veto amenaza con dejarlas sin acceso a la atención básica por las normas culturales
00:14que impiden que sean atendidas por médicos varones. La prohibición se suma a otras muchas
00:18impuestas contra las afganas desde el regreso de los fundamentalistas al poder en agosto
00:23de 2021. Ya prohibieron la educación superior femenina, que empujó a muchas mujeres a cambiar
00:28sus hábitos de formación y a acceder a los llamados estudios médicos cortos, obstetricia
00:32y enfermería, para poder desarrollar una carrera profesional. Mujeres como estas están
00:37siendo totalmente excluidas de la vida pública por las autoridades de un país inmerso en
00:41una crisis económica, social y humanitaria. Este veto, además de amenazar su futuro profesional,
00:47supone un peligro para la salud de miles de mujeres y niñas. El país tiene una de las
00:52tasas de mortalidad materna más altas del mundo, ya necesitaba miles de matronas adicionales
00:57Y ahora la pregunta que muchas mujeres se hacen es quién tratará a nuestras madres,
01:01hermanas e hijas. La Organización de Naciones Unidas y varias organizaciones internacionales
01:06como Human Rights Watch han denunciado que el veto tendrá consecuencias devastadoras
01:10para la salud de las mujeres afganas. Por eso instan a los talibanes a cumplir con sus
01:14obligaciones en materia de derechos humanos.