Silencio absoluto. Esa es la consigna que Anabel Pantoja y David Rodríguez han pedido a su entorno más cercano ante el delicado estado de salud de su hija Alma, ingresada desde hace una semana con pronóstico reservado en la Unidad de Medicina Intensiva del Hospital Materno Infantil de Las Palmas. Algo que Irene Rosales está siguiendo al pie de la letra, manteniendo día a día un hermetismo total ante las preguntas sobre el complicado trance que está viviendo la prima de Kiko Rivera.
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00:00¡Silencio absoluto! Esa es la consigna que Anabel Pantoja y David Rodríguez han pedido
00:07a su entorno más cercano ante el delicado estado de salud de su hija Alma, ingresada
00:12desde hace una semana con pronóstico reservado en la Unidad de Medicina Intensiva del Hospital
00:18Materno-Infantil de Las Palmas, algo que Irene Rosales está siguiendo al pie de la letra,
00:24manteniendo día a día un hermetismo total ante las preguntas sobre el complicado trance
00:29que está viviendo la prima de Kiko. Aunque las noticias que llegan desde el centro médico
00:34son positivas e invitan al optimismo, la mujer del DJ apuesta por la discreción y guarda
00:40silencio ante las cámaras. También apoyando incondicionalmente a su sobrina Isabel Pantoja,
00:46que permanece en Las Palmas y que este jueves se dejaba ver por primera vez en el hospital
00:51después de varios días logrando su objetivo de pasar desapercibida. Una reaparición ante
00:57la prensa a la que Irene ha reaccionado con absoluta seriedad, evitando pronunciarse sobre
01:03las informaciones que apuntan a que la tonadillera no quiso ver a Kiko en el hospital y a pesar
01:09de coincidir en su interior, evitó el incómodo reencuentro. Cabizbaja, la andaluza, ha dejado
01:15en el aire si es cierto que el entorno de Anabel se está organizando para no dejarla
01:20sola en ningún momento y ha preferido no revelar si el DJ o ella tienen pensado viajar
01:26en los próximos días a Canarias.