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00:00Taiwan aspira a convertirse en uno de los centros neurálgicos del desarrollo de la
00:05inteligencia artificial, y aunque lleva mucho tiempo preparándose para este reto, sus múltiples
00:10desafíos en materia energética siembran dudas en torno al futuro de su modelo productivo.
00:15A medida que los ordenadores, los teléfonos móviles y los centros de datos se hacían
00:20más complejos, los fabricantes de semiconductores han ido creando chips cada vez más pequeños
00:26y Taiwan destaca como líder absoluto en la producción de estos chips gracias a su
00:31buque insignia Taiwan Semiconductor Manufacturing Company, compañía que aglutina el 60% del
00:38mercado global de fabricación de semiconductores.
00:41Para consagrar su dominio en el sector, la compañía está construyendo dos nuevas plantas
00:45en el país, y estas fábricas requieren de grandes cantidades de energía para funcionar,
00:51y es aquí donde está el problema, ya que la isla depende excesivamente de la importación
00:57de combustibles fósiles y no ha desarrollado los suficientes subrenovables, además de
01:02la amenaza de bloqueo por parte de China que entorpecería el suministro energético por
01:07mar.
01:08A esto también hay que sumarle el compromiso del gobernante Partido Democrático Progresista
01:13de cerrar la última planta nuclear activa en Taiwán el próximo año.
01:18Sin embargo, el presidente taiwanés, William Lei, ha prometido un suministro de energía
01:23estable para convertir a Taiwán en una isla de inteligencia artificial, y ha dicho que
01:28el gobierno confía en que la capacidad de generación eléctrica será suficiente hasta
01:33por lo menos 2028, lo que cubrirá la demanda de las fábricas de chips y de los centros
01:39de computación de inteligencia artificial.