El incidente se produjo el pasado 1 de Diciembre y fue captado por la cámara de un videoaficionado, en la imagen se aprecia como el fuerte viento provoca ciertas oscilaciones en la aeronave, que al tomar tierra, acerca su cola peligrosamente al asfalto de la pista, en ese momento el piloto decide abortar el aterrizaje y volver a tomar altura. En el interior del Boing 737-900 de Turkish Airlines 72 pasajeros que, por un momento, pasaron un susto tremendo. Según el piloto de líneas aéreas e instructor, Francisco Jesús Fernández, la maniobra fue la correcta, como señala el procedimiento, abortar el aterrizaje, según este piloto, en esa zona el avión no tiene sensores, el piloto se guía por el ángulo de rotación y su experiencia, ante la duda, mejor tirar de la palanca de vuelo y ascender. A los pocos minutos el avión volvió a pista y aterrizó, tras una inspección técnica la aeronave volvió a despegar con 77 pasajeros rumbo a Estambul.
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