La vida de Carlos Páez se detuvo bruscamente el 13 de octubre de 1972, cuando tenía solo 18 años. Lo que parecía un emocionante viaje deportivo, junto a sus compañeros del equipo de Rugby del Colegio Stella Maris, de Montevideo, Uruguay, se convirtió en una de las experiencias más terribles, aleccionadoras e inolvidables que se recuerdan. Hace ya 50 años que el avión en el que viajaban se estrelló y desapareció en el duro invierno de los Andes.
Mientras el mundo les daba por perdidos, a 4.200 metros de altura, Carlitos Páez y sus compañeros de viaje supervivientes resistían en medio de las condiciones meteorológicas más extremas. Durante 72 días, enfrentaron el frío helado, las heridas, el miedo y el hambre. Tras una terrible lucha por la supervivencia, el grupo encontró la salida para la vida en un ejemplo de fuerza mental, resistencia y esperanza.
A pocos días de la Navidad, solo trece personas sobrevivían. En una epopeya de resistencia y valor, tras una dura expedición de diez días a través de la nieve, dos de ellos consiguieron pedir la ansiada ayuda. Días más tarde, eran rescatados sorprendiendo y emocionando al mundo.
Cinco décadas han pasado desde entonces y esta historia sigue representando uno de los hitos de superación humana más grandes de los últimos tiempos. La fe, el amor a la vida, la fuerza de un grupo que se mantuvo unido en la lucha fueron las claves. Carlos Páez ha dedicado buena parte de su vida a trasmitir lo aprendido, ayudando a muchas personas a enfrentarse a sus propias batallas, logrando convertir la tragedia y su experiencia en todo un ejemplo de superación.
Mientras el mundo les daba por perdidos, a 4.200 metros de altura, Carlitos Páez y sus compañeros de viaje supervivientes resistían en medio de las condiciones meteorológicas más extremas. Durante 72 días, enfrentaron el frío helado, las heridas, el miedo y el hambre. Tras una terrible lucha por la supervivencia, el grupo encontró la salida para la vida en un ejemplo de fuerza mental, resistencia y esperanza.
A pocos días de la Navidad, solo trece personas sobrevivían. En una epopeya de resistencia y valor, tras una dura expedición de diez días a través de la nieve, dos de ellos consiguieron pedir la ansiada ayuda. Días más tarde, eran rescatados sorprendiendo y emocionando al mundo.
Cinco décadas han pasado desde entonces y esta historia sigue representando uno de los hitos de superación humana más grandes de los últimos tiempos. La fe, el amor a la vida, la fuerza de un grupo que se mantuvo unido en la lucha fueron las claves. Carlos Páez ha dedicado buena parte de su vida a trasmitir lo aprendido, ayudando a muchas personas a enfrentarse a sus propias batallas, logrando convertir la tragedia y su experiencia en todo un ejemplo de superación.
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