Carlos Herrera intuye el resultado final de la guerra entre Page y el PSOE: "Solo la puntita y vuelta atrás"
Nueva polvareda en el PSOE.
Y, una vez más, Emiliano García-Page como actor esencial a la hora de discrepar con los suyos.
El presidente de Castilla-La Mancha volvió a sacar el fusil verbal para acusar a la formación de Pedro Sánchez, a su propio partido, de situarse poco menos que en el extrarradio de la Constitución.
Rápidamente salió la Guardia de Corps de Moncloa y Ferraz, Óscar Puente y Santos Cerdán, para devolver el golpe a Page.
Carlos Herrera, en su editorial en 'Herrera en COPE' de este 25 de enero de 2024, abordó un asunto que definió como una especie de sainete en cuatro actos:
Ayer Page tuvo un choque gordo, gordo, gordo con el PSOE. Seguramente todo para nada, porque hombre, al final, de alguna manera también ha matizado las críticas a la dirección del PSOE, pero ahí lo ha dejado. Le acompaño cronológicamente. Empieza Fitur y coincide con tres presidentes autonómicos del PP. Los cuatro se ponen de acuerdo para denunciar que sus territorios están infrafinanciados, que el Gobierno central les debe otorgar 3.000 millones para acabar con esa injusticia en comparación con otras comunidades.
Y en el corrillo informal que hicieron, en esa conversación, a García-Page se le escucha criticar la amnistía y decir a mí están a punto de extraditarme. Lo que ha hecho el PSOE es de tener una tensión máxima, echar a todo Dios que se le opone. Nadie se imagina lo que sufro. Que Page diga esas cosas a la sede del partido le cayó como una patada en el estómago. Pero es que Page se vino arriba y empieza un sainete en cuatro actos.
Primero, Page suelta la bomba de que con la amnistía el PSOE se ha situado en el extrarradio de la Constitución. Pero la balacera estaba asegurada. Eso es un disparo de los que le hacen saltar el sombrero al que está tomando el whisky en la barra del salón del Oeste.
Tan sonoro fue el disparo que ayer Ferraz no ignoró a Page, como ha hecho otras veces, y decidió mandar su pistolero más mal encarado, Billy el Puente. Mientras el barman ponía a buen recaudo las botellas, las señoras gritaban de terror, Page no se amilana y cuando un plumilla le cuenta lo que ha dicho Óscar Puente vuelve a sacar el revólver y vacía el cargador.
El comunicador almeriense subrayó que Page, escuchadas las declaraciones del ministro de Transportes, vuelve a disparar. Pero, de repente, como si hubiese recibido una consigna, empezó a bajar la intensidad de sus críticas:
Page le recuerda a Sánchez y sus esbirros que aquí el único socialista que ha ganado las elecciones en el condado es él, y que los demás bien harían en aprender un poco de su habilidad para derrotar a la derecha en las urnas. Con esa ráfaga se diría que Page se ha ganado el duelo, pero no sabemos si porque Ferraz le dio un toque telefónico o porque algún amigo le recordó cómo se las gasta Pedro, el forajido, el caso es que pasa de ser el pistolero más rápido de Fitur acabó matizando un poco como al que le empieza a doler un poco el trasero.
Y, una vez más, Emiliano García-Page como actor esencial a la hora de discrepar con los suyos.
El presidente de Castilla-La Mancha volvió a sacar el fusil verbal para acusar a la formación de Pedro Sánchez, a su propio partido, de situarse poco menos que en el extrarradio de la Constitución.
Rápidamente salió la Guardia de Corps de Moncloa y Ferraz, Óscar Puente y Santos Cerdán, para devolver el golpe a Page.
Carlos Herrera, en su editorial en 'Herrera en COPE' de este 25 de enero de 2024, abordó un asunto que definió como una especie de sainete en cuatro actos:
Ayer Page tuvo un choque gordo, gordo, gordo con el PSOE. Seguramente todo para nada, porque hombre, al final, de alguna manera también ha matizado las críticas a la dirección del PSOE, pero ahí lo ha dejado. Le acompaño cronológicamente. Empieza Fitur y coincide con tres presidentes autonómicos del PP. Los cuatro se ponen de acuerdo para denunciar que sus territorios están infrafinanciados, que el Gobierno central les debe otorgar 3.000 millones para acabar con esa injusticia en comparación con otras comunidades.
Y en el corrillo informal que hicieron, en esa conversación, a García-Page se le escucha criticar la amnistía y decir a mí están a punto de extraditarme. Lo que ha hecho el PSOE es de tener una tensión máxima, echar a todo Dios que se le opone. Nadie se imagina lo que sufro. Que Page diga esas cosas a la sede del partido le cayó como una patada en el estómago. Pero es que Page se vino arriba y empieza un sainete en cuatro actos.
Primero, Page suelta la bomba de que con la amnistía el PSOE se ha situado en el extrarradio de la Constitución. Pero la balacera estaba asegurada. Eso es un disparo de los que le hacen saltar el sombrero al que está tomando el whisky en la barra del salón del Oeste.
Tan sonoro fue el disparo que ayer Ferraz no ignoró a Page, como ha hecho otras veces, y decidió mandar su pistolero más mal encarado, Billy el Puente. Mientras el barman ponía a buen recaudo las botellas, las señoras gritaban de terror, Page no se amilana y cuando un plumilla le cuenta lo que ha dicho Óscar Puente vuelve a sacar el revólver y vacía el cargador.
El comunicador almeriense subrayó que Page, escuchadas las declaraciones del ministro de Transportes, vuelve a disparar. Pero, de repente, como si hubiese recibido una consigna, empezó a bajar la intensidad de sus críticas:
Page le recuerda a Sánchez y sus esbirros que aquí el único socialista que ha ganado las elecciones en el condado es él, y que los demás bien harían en aprender un poco de su habilidad para derrotar a la derecha en las urnas. Con esa ráfaga se diría que Page se ha ganado el duelo, pero no sabemos si porque Ferraz le dio un toque telefónico o porque algún amigo le recordó cómo se las gasta Pedro, el forajido, el caso es que pasa de ser el pistolero más rápido de Fitur acabó matizando un poco como al que le empieza a doler un poco el trasero.