LifeHacker ha revelado varios consejos y trucos para limpiar las brochas de maquillaje.
Dado que la mayoría de las personas que usan maquillaje lo hacen con regularidad, tus herramientas pueden contaminarse rápidamente.
Usar una brocha sucia puede provocar brotes, ya que distribuye bacterias por la piel, por lo que es importante limpiarlas cada 7 u 10 días.
Algunos trucos de TikTok recomiendan el uso de aceite, que puede ser difícil de eliminar de las cerdas y causar irritación en ciertos tipos de piel.
El alcohol también es una mala idea, ya que puede debilitar el pegamento que sujeta las cerdas al mango.
En su lugar, aclara el maquillaje externo con agua, llena un recipiente con agua micelar y agita las puntas de las brochas en él.
Vacía y vuelve a llenar el cuenco con agua limpia, luego mezcla unas gotas de jabón suave para vajilla o champú para bebés y masajéalo con las manos.
Exprime el exceso de agua cuando termines y colócalas en horizontal sobre una toalla de papel, después coloca las cerdas en su forma normal y déjalas secar al aire.
Las esponjas de maquillaje siguen el mismo patrón, pero puedes omitir el agua micelar y pasar directamente al agua y el champú para bebés, que actúa como limpiador.
Déjala sumergida durante 10 minutos y luego sácala, aplica jabón y masajéala a fondo mientras aclaras hasta que el agua que salga de ella sea transparente.
Por último, deja que la esponja se seque al aire, pero asegúrate de girarla de vez en cuando para evitar manchas de humedad. Apriétala y asegúrate de que no notas humedad.
Dado que la mayoría de las personas que usan maquillaje lo hacen con regularidad, tus herramientas pueden contaminarse rápidamente.
Usar una brocha sucia puede provocar brotes, ya que distribuye bacterias por la piel, por lo que es importante limpiarlas cada 7 u 10 días.
Algunos trucos de TikTok recomiendan el uso de aceite, que puede ser difícil de eliminar de las cerdas y causar irritación en ciertos tipos de piel.
El alcohol también es una mala idea, ya que puede debilitar el pegamento que sujeta las cerdas al mango.
En su lugar, aclara el maquillaje externo con agua, llena un recipiente con agua micelar y agita las puntas de las brochas en él.
Vacía y vuelve a llenar el cuenco con agua limpia, luego mezcla unas gotas de jabón suave para vajilla o champú para bebés y masajéalo con las manos.
Exprime el exceso de agua cuando termines y colócalas en horizontal sobre una toalla de papel, después coloca las cerdas en su forma normal y déjalas secar al aire.
Las esponjas de maquillaje siguen el mismo patrón, pero puedes omitir el agua micelar y pasar directamente al agua y el champú para bebés, que actúa como limpiador.
Déjala sumergida durante 10 minutos y luego sácala, aplica jabón y masajéala a fondo mientras aclaras hasta que el agua que salga de ella sea transparente.
Por último, deja que la esponja se seque al aire, pero asegúrate de girarla de vez en cuando para evitar manchas de humedad. Apriétala y asegúrate de que no notas humedad.
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