Donald Trump anunció una iniciativa para racionalizar las operaciones federales contratando a Elon Musk y Vivek Ramaswamy para dirigir su recién propuesto Departamento de Eficiencia Gubernamental.
Describiendo la iniciativa como el 'Proyecto Manhattan' de reforma gubernamental, Trump esbozó planes de recortes drásticos y reestructuración en todas las agencias federales para el 4 de julio de 2026.
Presentó esta reforma como un regalo histórico para el 250 aniversario de la independencia de Estados Unidos.
Elon Musk, multimillonario detrás de empresas como SpaceX y Tesla, prometió su apoyo, comprometiéndose a ayudar a Trump a recortar 2 billones de dólares en gasto federal.
Los detalles sobre cómo Musk va a bordar esta tarea son vagos y podrían existir conflictos de intereses, ya que varias de sus empresas tienen amplios contratos con el gobierno.
Su frustración con organismos reguladores como la FAA y el Departamento de Interior, que supervisan los lanzamientos de SpaceX, ha alimentado sus llamamientos a reducir la supervisión gubernamental.
Ramaswamy, antiguo ejecutivo del sector farmacéutico, ha sido un firme defensor de la eliminación de organismos federales, como el Departamento de Educación, el FBI y el IRS.
Ha propuesto recortar la plantilla federal en un 75% y reducir la ayuda exterior a naciones como Ucrania, Israel y Taiwán.
Esta nueva iniciativa refleja el renovado compromiso de Trump de «drenar el pantano» y se alinea con las promesas pasadas de frenar la burocracia.
Con el nombramiento de Musk y Ramaswamy, Trump pretende abordar las ineficiencias sistémicas, recortar el gasto y, en última instancia, remodelar el Gobierno federal.
Describiendo la iniciativa como el 'Proyecto Manhattan' de reforma gubernamental, Trump esbozó planes de recortes drásticos y reestructuración en todas las agencias federales para el 4 de julio de 2026.
Presentó esta reforma como un regalo histórico para el 250 aniversario de la independencia de Estados Unidos.
Elon Musk, multimillonario detrás de empresas como SpaceX y Tesla, prometió su apoyo, comprometiéndose a ayudar a Trump a recortar 2 billones de dólares en gasto federal.
Los detalles sobre cómo Musk va a bordar esta tarea son vagos y podrían existir conflictos de intereses, ya que varias de sus empresas tienen amplios contratos con el gobierno.
Su frustración con organismos reguladores como la FAA y el Departamento de Interior, que supervisan los lanzamientos de SpaceX, ha alimentado sus llamamientos a reducir la supervisión gubernamental.
Ramaswamy, antiguo ejecutivo del sector farmacéutico, ha sido un firme defensor de la eliminación de organismos federales, como el Departamento de Educación, el FBI y el IRS.
Ha propuesto recortar la plantilla federal en un 75% y reducir la ayuda exterior a naciones como Ucrania, Israel y Taiwán.
Esta nueva iniciativa refleja el renovado compromiso de Trump de «drenar el pantano» y se alinea con las promesas pasadas de frenar la burocracia.
Con el nombramiento de Musk y Ramaswamy, Trump pretende abordar las ineficiencias sistémicas, recortar el gasto y, en última instancia, remodelar el Gobierno federal.
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