Un cuento corto Ferrán Ramón Cortés para pensar.
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Estilo de vidaTranscripción
00:00TENEMOS UN CAFÉ PENDIENTE. Un cuento de Ferran Ramón Cortés para la revista Mente Sana.
00:08Verónica salía del trabajo para irse a casa. Se dirigió a la parada del autobús y justo
00:13al llegar se dio cuenta de que Juan, un compañero, estaba allí, esperando. Inmediatamente ralentizó
00:20el paso y con disimulo esperó a cierta distancia a que llegara el autobús y subiera la gente.
00:26Un minuto después la parada quedó vacía, excepto por un hombre que se había quedado
00:30en el banco. Verónica se sentó a su lado y el hombre le dijo, ¿Has perdido aposta
00:36al autobús? Verónica estaba sorprendida, no esperaba que hubiera sido tan evidente.
00:41Viendo la expresión afable del hombre se atrevió a comentar, sí, había alguien en
00:46la parada con quien no me apetecía viajar. Tras un intercambio de miradas cómplices,
00:52el hombre mayor le dijo, me llamo Max y el próximo autobús tardará un 15 minutos,
00:58¿me lo cuentas? Es sencillo, se trata de mi compañero Juan. Hace dos años que no
01:04nos hablamos y cada vez me apetece menos coincidir con él. ¿Qué ocurrió? Casi no lo recuerdo.
01:11Tuvimos una discusión en una reunión, nos dijimos algunas cosas y a partir de allí
01:15se enquistó el conflicto. ¿Y no habéis hablado nunca del tema? Lo intenté una vez,
01:21pero él reaccionó fatal, me dijo textualmente que no teníamos nada de qué hablar. Max,
01:27que la escuchaba con atención, apuntó, pues creo que tienes un café pendiente con él.
01:33¿Un café pendiente? Sí, llamo cafés pendientes a esas conversaciones aplazadas que todos
01:39tenemos que perjudican nuestras relaciones y que, sin embargo, no nos atrevemos o no
01:44sabemos cómo abordar. ¿Y por qué cafés? Porque necesitan cierta ceremonia. No son
01:51conversaciones que puedan tenerse precipitadamente en un pasillo o en un despacho o en la parada
01:56del metro o del autobús. ¿Y cómo sabemos que tenemos un café pendiente? Lo identificarás
02:03fácilmente porque cuando veas o te cruces con la persona con la que lo tienes, el tema
02:08que os separa te vendrá inevitablemente a la mente.
02:12Max sintonizó con aquella idea al instante. Reconocía que a veces se cruzaba con personas
02:18e inmediatamente recordaba algún episodio vivido del que no habían hablado. Eran episodios
02:24que no le quitaban el sueño, pero que volvían a su mente al ver a la persona involucrada.
02:30Max continuó su explicación. Y también porque, y esto puede que no lo sientas conscientemente,
02:36tenderás a evitar a esa persona precisamente por eso.
02:39¿Cómo me ha ocurrido ahora con Juan? Exactamente. Permanecieron en silencio. Verónica absorbía
02:46la información y trataba de darle sentido. Sin dejar pasar mucho rato, lo interpeló
02:51de nuevo. Pero ella quise tener ese café pendiente. Quise hablar con Juan y él se
02:57negó. Su respuesta, como ya te he dicho, fue contundente.
03:02Una respuesta que necesita traducción. No tenemos nada de qué hablar en el contexto
03:07de un conflicto significa no estoy preparado aún. No es un portazo, es un aplazamiento.
03:14Será bueno que lo vuelvas a probar al cabo de un tiempo.
03:18Verónica reflexionaba con la mirada perdida. ¿Sabes, Max? Creo que tengo unos cuantos
03:23cafés pendientes, pero si te digo la verdad, no tengo ni idea de cómo tenerlos. Déjame
03:29que te explique cómo yo los concibo y qué tiene que ver con esa ceremonia de la que
03:34te hablaba. Para empezar, creo que es bueno lanzar un
03:38primer mensaje. Hacer saber a la persona que te gustaría hablar con ella. Puedes obtener
03:44distintas respuestas, desde el vale, hablemos, que es un buen presagio de cómo ir a la conversación,
03:50al no tenemos nada de qué hablar, que es solo un aplazamiento, pasando por el hablemos mañana,
03:56que significa déjame prepararme. Luego vendrá la conversación en sí. Busca
04:01una cantidad de tiempo generosa y un lugar apropiado. Aquí la regla de oro es hablar
04:07solo de lo que a ti te pasó, de lo que sentiste. Sin acusaciones, sin juicios, sin reproches,
04:14si aparece algo de todo esto, la conversación fracasará.
04:18Pero en algún momento tendremos que discutir sobre quién tenía razón. Los conflictos
04:23no son de razones, son de sentimientos. Y esto es de lo único que tenemos que hablar,
04:29de sentimientos. Y si nos hemos dicho cosas gordas, la disculpa será balsámica. Debes
04:35ofrecerla generosamente, sin exigir otra a cambio.
04:40El autobús se retrasaba, circunstancia que por una vez Verónica agradecía.
04:44Max, ¿tiene sentido para ti que yo pueda tener un café pendiente con alguien no por
04:51algo que nos separa, sino por algo que no le he agradecido? Tiene todo el sentido del
04:56mundo. Los cafés pendientes son para lo malo y para lo bueno. ¿Y es necesario que
05:02los dos tengamos esa sensación? En absoluto. El café pendiente es algo que yo tengo,
05:07independientemente de lo que tenga el otro. Soy yo el que se lo quiere sacar de la cabeza.
05:13El autobús se dejaba ver a lo lejos. Verónica lanzó su última pregunta. ¿Funciona siempre?
05:19No tienes garantía, pero no pierdes nada. Y un buen café a media mañana siempre ayuda.
05:27Llegó el autobús. Verónica se levantó e hizo señas al conductor para que parase. Subió,
05:32pagó y se dirigió a un asiento vacío. Iba a ofrecérselo a su acompañante cuando
05:39reparó en que este no había subido. Miró fuera, intentando localizarlo con la mirada. Quería,
05:45aunque fuera con un gesto, agradecerle sus reflexiones, pero no lo vio por ningún lado.
05:50Sencillamente y como si nunca hubiera estado allí, se había esfumado.
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