Mantener una dieta equilibrada es esencial para preservar la salud del cerebro y funciones cognitivas como la memoria.
Según un estudio de la Universidad de Harvard, los siguientes tres alimentos pueden dañar la salud cerebral y contribuir a la aparición de enfermedades.
Productos ultraprocesados
Estos alimentos se someten a intensos procesos químicos que eliminan antioxidantes y nutrientes esenciales, como la vitamina E.
Llenos de calorías vacías y compuestos tóxicos, pueden provocar adicción a la comida, aumento de peso, diabetes de tipo 2, enfermedades cardíacas y debilitar el sistema inmunitario.
Azúcares refinados en exceso
El consumo elevado de azúcar refinado provoca picos de glucosa en sangre, sobrecarga el hígado y contribuye a la acumulación de grasa en el organismo.
Estos desequilibrios se asocian a enfermedades cardiovasculares, además de aumentar el riesgo de alteraciones metabólicas e inflamaciones perjudiciales para el cerebro.
Edulcorantes artificiales
Aunque a menudo se utilizan como sustitutos del azúcar, los edulcorantes artificiales pueden alterar la flora intestinal y proporcionar falsos estímulos al cerebro, aumentando los antojos de alimentos azucarados.
Su consumo excesivo está relacionado con problemas metabólicos y desequilibrios en la salud general.
Según un estudio de la Universidad de Harvard, los siguientes tres alimentos pueden dañar la salud cerebral y contribuir a la aparición de enfermedades.
Productos ultraprocesados
Estos alimentos se someten a intensos procesos químicos que eliminan antioxidantes y nutrientes esenciales, como la vitamina E.
Llenos de calorías vacías y compuestos tóxicos, pueden provocar adicción a la comida, aumento de peso, diabetes de tipo 2, enfermedades cardíacas y debilitar el sistema inmunitario.
Azúcares refinados en exceso
El consumo elevado de azúcar refinado provoca picos de glucosa en sangre, sobrecarga el hígado y contribuye a la acumulación de grasa en el organismo.
Estos desequilibrios se asocian a enfermedades cardiovasculares, además de aumentar el riesgo de alteraciones metabólicas e inflamaciones perjudiciales para el cerebro.
Edulcorantes artificiales
Aunque a menudo se utilizan como sustitutos del azúcar, los edulcorantes artificiales pueden alterar la flora intestinal y proporcionar falsos estímulos al cerebro, aumentando los antojos de alimentos azucarados.
Su consumo excesivo está relacionado con problemas metabólicos y desequilibrios en la salud general.
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